Viajar con talonario, Bancotel y otros

En 1988 se creó en España una nueva forma de reservar y pagar habitaciones de hotel con la aparición del Talonario Bancotel. Pronto fueron tomando popularidad y salieron al mercado otros talonarios como el de Hotelcolor o Talonotel de similares características. Los talones son un justificante de pago que pueden utilizarse en establecimientos concertados con cada empresa. El precio es ventajoso en comparación con otras opciones de reserva.

El funcionamiento es simple. El cliente adquiere un talonario válido por unos dos años, dependiendo del que sea, en una agencia de viajes. Después selecciona el establecimiento hotelero de entre los adheridos al programa. En el listado le indican cuantos talones necesita por cada noche, dependiendo del hotel y la fecha del viaje. Siempre se habla de talón por habitación, no por persona. Se reserva el hotel avisando de que el pago será con el talón elegido y ya está. Habitualmente el IVA se paga a parte, al salir del hotel, pero depende del talonario.

Los talonarios son especialmente interesantes en temporada baja y media, ya que los hoteles reservan un cupo de habitaciones para ellos, mucho menor en temporada alta. Con los talones se pueden reservar otros servicios, como entradas a parques de atracciones o coches de alquiler.

Entre las ventajas de usar los talones para viajar yo destacaría la libertad para elegir la fecha de uso, que no son nominativos y por tanto se pueden compartir con familia o amigos, y que tienen una duración suficiente. Entre las desventajas, principalmente que son poco útiles en temporada alta, verano, Semana Santa y Puentes, en que la mayoría podemos viajar, y la dificultad para encontrar habitación en algunos establecimientos que reservan un cupo muy limitado para clientes de talonario.

Una de las cosas que mejor representa la popularidad de los talonarios es su uso cada vez más habitual como regalo de Navidad. ¿Te pedirás uno a los Reyes?

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