En dos días, el 30 de enero se inaugura FITUR una de las ferias de turismo más importantes del mundo y sin duda la más importante de España. El año pasado participaron 167 regiones / países y 119.322 personas entre expositores y visitantes profesionales. Además hubo más de 91.000 visitantes no profesionales. Aunque este año se ha reducido el número de expositores y metros cuadrados, FITUR sigue siendo uno de nuestros mejores escaparates.
Sin embargo, cuando los visitantes profesionales extranjeros aterricen en el aeropuerto de Barajas, la primera impresión será la de que han llegado al Tercer Mundo. Da lo mismo las modernas instalaciones del aeropuerto, lo bien organizada que esté la feria, la calidad de su hotel, la imagen que no podrán borrar será la de la basura acumulada en el suelo de las terminales.
Hay huelga de limpieza en Barajas, como tantas veces. Los trabajadores de la limpieza de la empresa Pilsa protestan por el ERE que contempla 54 despidos. Parece lógico que protesten cuanto puedan ante un número tan elevado de despidos. Pero, una vez más nos encontramos con los derechos individuales enfrentados al bien común. Y es que España vive del Turismo y FITUR es una de nuestras principales tarjetas de presentación.
Los servicios mínimos no parecen dar a basto y la mitad de los baños de las terminales 1, 2 y 3 están cerrados. La T4 se ha unido hoy a la huelga, dependen de otra empresa que también amenaza con despidos. En dos días la T4 estará con el mismo aspecto que las otras y mañana mismo comienzan las llegadas de representantes turísticos a Barajas. Nunca hemos necesitado tanto la llegada de turistas que directa e indirectamente crean empleo, entre otros en las instalaciones del aeropuerto.
Vía | Antena 3
Foto | Madridactual