Salir de viaje siempre requiere de una previa preparación, más aún cuando el viaje lo vamos a realizar en familia, con niños. En estos casos hay cosas que no debemos olvidarnos nunca, en este artículo te las mencionaremos para que puedas pasar un excelente viaje.
Cuando uno viaja acompañado de niños pueden pasar cosas impredecibles que, de no ser tratadas adecuadamente, pueden arruinarnos el viaje, por eso en la planificación deberás cubrir todas las posibilidades.
Si tu hijo es pequeño te aconsejamos colocarle en su sillita de viaje algunos juguetes móviles, o algún sonajero para que se entretenga durante el viaje. Debes llevar bebida y alimentos. Si viajas con un bebé puedes usar el termo para llevar alguna porción de puré, que permitirá mantener la temperatura. Entre las bebidas la más aconsejada es el agua. Ten en cuenta que las gaseosas no son del todo recomendadas para llevar en el auto y los zumos naturales pueden llegarse a descomponer.
Lleva artículos de limpieza como jabón y toalla, toallitas húmedas, pañales, paño para secar. No te olvides de alguna bolsa de plástico con auto cierre (nos permite colocar los deshechos que vamos realizando en el coche).
Siempre ten a mano una muda de ropa limpia para los pequeños, recuerda que pueden llevar a ensuciarse o puede suceder algún otro imprevisto que causará que los debamos cambiar.
Dos accesorios que en ocasiones nos olvidamos pero son muy útiles son las mantas y los parasoles. En el caso de que el viaje sea realizado en invierno nada mejor que llevar una mantita para darle calor al bebé cuando se quede dormido. Si viajamos durante una época de calor los rayos solares pueden molestar bastante a los pequeños.
Antes de salir te aconsejamos verificar si el botiquín está completo y si ningún medicamento o producto ha caducado.
Tomando todos estos recaudos simples podrás disfrutar de un viaje de manera tranquila y en familia.
Vía | ABC
Foto | Flickr – Rafitorres