Continuamos haciendo un balance, después de seis meses de su entrada en vigor, del segundo real decreto que regula el trabajo y descanso de los controladores aéreos, entre otros aspectos. Una norma que se ha planteado que pueda ir en contra de la Constitución.
Las horas de trabajo de este colectivo es uno de los puntos claves que se aborda en la ley. Ahora los controladores españoles tienen que trabajar cerca de 1.700 horas, más que la media europea y se han reducido sus descansos por lo que hay trabajadores que cubren has turnos de 17 horas, algo que puede afectar a la seguridad aérea.
Siguiendo los argumentos de César Cabo, portavoz de Usca: «Se ha primado a corto plazo cubrir con horas extras en lugar de formar plantilla. Si cubrimos esas horas ganamos dinero y somos malos. Pero si no lo hacemos y no hay plantilla, y la gente no puede volar en vacaciones se nos acusa de huelga encubierta«, explica Cabo.
Ahora por ley están obligados a cubrir ese tiempo como horas laborables normales. Se trata de un atropello que debería preocupar a muchos juristas dado que sienta un precedente que el Gobierno puede utilizar para trasladar a otros colectivos de trabajadores, aseguran desde Usca.
El Real Decreto establece que estos trabajadores tienen que trabajar más turnos impuestos de forma arbitraria con más horas en cada turno. Esto puede suponer un enorme riesgo para la seguridad aérea, asegura César Cabo, ya que hay controladores que en 31 días trabaja 28 servicios. Se trabaja 17 horas en un mismo día obligatoriamente, se han reducido los tiempos de descanso en los turnos.
«Todo esto hace que la cadena de seguridad en control aéreo que tiene que estar muy bien vigilada, se esté llevando a un extremo incrementado el riesgo de accidente. (…) Los criterios económicos no pueden primar frente a los de seguridad», arguye. Respecto de las huelgas encubiertas, este profesional subraya que son acusaciones muy graves que de ser ciertas tenían que haber sido denunciadas y no lo han hecho porque quizá son frases huecas de Aena.
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