Como explicaba Mónica hace unos días, la puesta en marcha del AVE Madrid-Valencia, se quedará con el 55 por ciento de los 850.000 pasajeros que vuelan entre ambas ciudades. Las cinco aerolíneas que operan esta ruta se han puesto manos a la obra para reducir lo máximo posible este efecto.
Lo cierto es que lo tienen complicado, sólo el tiempo que se tarda en llegar desde ambos aeropuertos a la ciudad, en comparación con el que se tarda desde la estación de tren, ya les pone en desventaja. Al igual que sucedió con la inauguración del AVE Madrid – Barcelona, en que la tarifa del puente aéreo se redujo de media en un 35 por ciento, las aerolineas ya han lanzado sus ofertas y han planeado algunas reducciones en las frecuencias.
Iberia tenía ayer billetes entre las dos ciudades por 32 euros para el día de la inauguración, y actualmente hay plazas a 55 euros. Sin embargo son conscientes de que en trayectos tan cortos la competencia con el tren es muy complicada y ya han planteado una reducción de los vuelos a la mitad. Air Nostrum por el contrario duplicará los vuelos y de esa forma ambas compañías mantienen el número de vuelos, aunque se reduce el número de pasajeros.
Spanair ha anunciado la reducción de uno de sus tres vuelos diarios durante este invierno. Se centrarán en los pasajeros de conexión, aquellos que vuelan a Madrid para tomar un avión a otro destino. Ryanair, que va a esperar hasta ver los efectos del AVE, tiene pasajes para el día 15 de diciembre por 21.99 euros, que con todo incluído sube hasta 29,15 euros. Es posible encontrar billete en alguno de los dos o tres vuelos diarios desde 4,99 euros.
Se espera que el precio del AVE ronde los 80 euros.
Vía | ABC
Foto | Flickr-Fabio Gava
