Hay muchas parejas que prefieren celebrar su boda en el destino de su luna de miel, o comenzar esta última casándose. Las Vegas o las Islas del Pacífico son algunos de los lugares más habituales para celebrar un matrimonio diferente u exótico. Pero se puede ser más original, por ejemplo tematizando la boda hasta el extremo con nuestra afición favorita, aunque esta sea tan complicada de integrar como volar o bucear.
Algunos acuarios facilitan las bodas entre tiburones, con los novios e incluso a veces el oficiante dentro del tanque en que viven estos animales. Al coste, unos 400 euros, habrá que sumar dos trajes de repuesto, porque no hay traje de ceremonia que resista el agua salada.
Los más nostálgicos, románticos o macabros, depende del punto de vista, pueden casarse en el Museo del Titanic. El capitán Smith celebra en el rellano de la famosísima escalera con música de Celine Dion de fondo. El precio supera los 1.340 euros. Sin duda el vestido de la novia en este escenario debe lucir magnificamente.
Para los amantes de las alturas también hay opciones, puedes casarte saltando desde 3.048 metros en paracaídas o, sobre una plataforma móvil a 164 metros. La alquila Sky.com, tiene capacidad para 20 personas y los novios pueden hacen puenting tras el sí quiero. Si lo que os gusta es el frío podéis alquilar la capilla de un hotel de hielo, y si por el contrario buscáis el calor, en Sudáfrica es posible contraer matrimonio a lomos de un elefante.
Vía | ABC
Foto | Marriage in the Sky