Los cruceros que hasta hace pocos años eran exclusivos para viajeros con alto poder adquisitivo, se han popularizado convirtiéndose en una alternativa más para veranear. Las compañías, además de adaptarse al nuevo tipo de pasajero, deben buscar la diferenciación. Unos se apoyan en las ofertas de ocio, como Royal Caribbean y otros mejoran sus acomodaciones, como es el caso de Norwegian Cruise Line (NCL).
La naviera estadounidense ha presentado su nuevo modelo de balcony y Mini-suites que irán en los nuevos proyectos de la compañía. Tienen prevista la construcción de dos nuevos barcos para su opción Freestyle Cruising de la que ya hablamos. Esperan inaugurarlos en abril de 2013 y 2014 respectivamente.
Las nuevas cabinas del Proyecto Breakaway serán 1.024 camarotes con balcón y 238 mini-suites en cada uno de los dos nuevos barcos. Están diseñadas por prestigiosos grupos de vanguardia europeos, y se inspiran en los hoteles boutique, un ambiente contemporáneo, acogedor y práctico. Estarán equipadas con camas king-size y sofá cama adicional, iluminación LED y toda la tecnología de tabletas digitales, pantallas planas y un sistema para el control de energía e iluminación en el camarote.
Kevin Sheehan, CEO de NCL ha explicado que, «nuestro objetivo es lograr un buen equilibro entre forma y función e intentar aprovechar al máximo el uso del espacio dentro de los camarotes para que nuestros huéspedes se sientan cómodos».
Vía | Expreso
Foto | Flickr-Zqvol
ciertamente muy atractivos y cómodos, como todo lo que suelen ingeniar los nórdicos