China es sin lugar a dudas un destino fantástico pero complejo. China demanda mucha atención. No es fácil planificar un viaje largo y si se pretende conocer diferentes destinos. Por eso en muchas ocasiones lo mejor es recurrir a una agencia. Ten presente que el idioma es una barrera casi infranqueable, es muy complicado comunicarse en los hoteles (solo se habla en ingles en los alojamientos 5 estrellas) y empresas para contratar guías, visitas, vehículos.
In situ es preciso moverse con un guía hispano parlante, el chino es un idioma contextual y no sirve usar palabras sueltas: si éstas no responden a la entonación correcta (hay cinco tipos diferentes) y la información de contexto no es la adecuada, el significado cambia.
Requisitos: Seis meses de validez del pasaporte. Visa China. Los trámites deben empezarse con un mes de anterioridad.
La mejor época para ir es durante el otoño y primavera. La excepción: del 1 / 10 de octubre, días en los que los sitios más visitados están atestados de público chino.
Lo que debes saber:
El peso máximo de equipaje permitido es de 20 Kg. En vuelos domésticos.
Los hoteles 4 estrellas son correctísimos aunque no todos dan desayuno americano o continental y debajo de los edredones de la mayoría de los colchones duros como camas de fakir.
El hotel que se encuentra frente al Templo Ta’er en Xining, suele tener problemas de calefacción, pero dormir en un cuarto ambientado con genuinos muebles y objetos de decoración tibetanos es una experiencia que perdonas cualquier inconveniente.
En los restaurantes los mozos no hablan ingles y las cartas sólo contienen ideogramas. Aquí, la ayuda de un guía que hable tu idioma será fundamental.
Los baños públicos no tienen inodoros sino letrinas.
No es aconsejable tomar agua de la canilla.
Los números 4, 14 o 24 figuran en los ascensores sólo a título decorativo. El 4 es número de mala suerte.
Si vas por la calle lleva siempre encima la tarjeta del hotel escrita con ideogramas chinos e ilustrada con un mapa. Muéstrale al taxista, porque la mayoría no entiende el nombre del hotel en ingles, y es probable que tampoco sepa dónde queda.
El tránsito es un caos, desde la apertura económica loas autos, que antes eran un bien de lujo, coexisten con las bicicletas, y hoy llegan a sumar 400 millones. Hay que estar muy atento en el momento de cruzar.
Tibet: debido al conflicto con el gobierno chino, hay zonas aledañas que pueden estar cerradas al turista. Esto obligaría a un cambio de destino a último momento, para visitar una ciudad o templo alternativo.
En todos los templos religiosos consulte antes de fotografiar a un monje: no suelen ser amigos de las fotos. Fuera de los santuarios es al revés: a los chinos les encanta que los fotografíen.
El regateo es costumbre que debe respetarse. Para salvar a barrera idiomática, los vendedores ofrecen una calculadora el comprador para que haga su oferta y así se ven pasando la calculadora sin decir ni pío hasta convenir el precio final.
Fuente | Revista Lugares
Imagen | China http://www.tripadvisor.es/LocationPhotos-g2-w2-Asia.html
Más Información | China Por Descubrir
1 respuesta
[…] Una vez en Mongolia, se lo cambia por un coche ce comida mongoles lo mismo que pasa cuando pasa por China. Los delegados del tren se ocupan de mantener limpio el baño y que siempre haya agua caliente para […]