Es más que posible que las aerolíneas repercutan en sus pasajeros, en forma de tasa, el coste de los derechos de emisión. Para que no aprovechen la circunstancia para inflar los precios, la Comisión Europea vigilará los recargos que impongan las compañías. Entendemos que podrá sancionarse a la que se exceda.
Isaac Valero, portavoz de Cambio Climático del Ejecutivo europeo ha explicado que el incremento de los billetes domésticos dentro de Europa será de entre 1.8 y 9 euros y para los intercontinentales entre 2 y 12 euros. Pero, ha recordado que ahora tendrá que ser más barato, siendo los de largo recorrido entre 0.78 y 1.6 euros. El motivo es que durante este año las aerolíneas tienen el 85 por ciento de los permisos de emisión gratis. El año que viene será el 82 por ciento.
Los permisos de emisión se compran y venden en lo que se conoce como Comercio de derechos de emisión. Las empresas, en este caso las compañías aéreas tienen permitida una cantidad fija de emisiones contaminantes. Dicha cantidad se gestiona en forma de bonos, créditos que dan derecho a emitir una determinada cantidad de gases. Si una compañía no contamina lo suficiente para gastar todos sus bonos, los puede poner a la venta. Así la que contamine más de lo que le permiten, puede comprar derechos de contaminación.
Se espera que con el 85 por ciento muchas tengan suficiente, por lo que el 15 restante lo podrán vender en el sistema de comercio.
Vía | Expreso
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