Las montañas rusas son una fuente de diversión para muchas personas, menos para mi. Será por el vértigo, la velocidad o el hecho de dar vueltas y vueltas pero no me subo a una ni que me obliguen, lo que no puedo negar es que me llaman mucho la atención. Además, los expertos aseguran que existen más posibilidades de morir por un rayo que en una montaña rusa. Insisto, conmigo no cuenten para probar.
En lugares como el Reino Unido las posibilidades de morir en una atracción de feria son de 300 millones a uno, en cambio las de morir por un rayo de 10 millones a uno. En Estados Unidos son una atracción verdaderamente popular, de los 1.7 millones de trayectos que tienen, estos son disfrutados por 300 millones de personas anualmente. Entre los años 1994 y 2004 se estima que solo cuatro personas murieron cada año, en cambio 39 personas murieron por un rayo anualmente.
Las montañas rusas son construidas con altas normas de seguridad, además deben tener un alto índice de mantenimiento, debemos pensar que estas máquinas llevan al cuerpo humano a extremos realmente emocionantes y que nadie quiere tener un accidente.
Dentro de las miles y miles que encontraras distribuidas la más extrema es la Fórmula Rossa ubicada en Abu Dhabi el parque temático de Ferrari World, la misma llega alta velocidad, la misma fue fabricada por Liechtenstein Intamin. La que mayor aceleración alcanza es la de Japón, llamada Dodonpa y la más alta la de Ka Kingda en Six Flags Great Adventure en Jackson, Nueva Jersey (Estados Unidos).
Pero lo más emocionante está por venir, de la mano de la empresa California BRC Imagination Arts quiere lograr la más alta y la más rápida, además de querer que sus pasajeros se sientan ingrávidos por 8 segundo continuos.
Vía | BBC
Foto | Flickr – Vladix