Estamos acostumbrados a que las conexiones aéreas sean bien entre dos ciudades importantes, o bien entre aeropuertos secundarios en el caso de las aerolíneas de bajo coste. Pero no siempre es así y en el mapa aéreo hay algunas rutas que sin conocer las circunstancias que las han motivado, parecen muy extrañas. Hay casos debidos a un alto número de inmigrantes que compensa conectar con su ciudad natal, otros porque la ciudad pequeña es el punto de partida para llegar a una plataforma petrolífera, hay motivos religiosos y siempre económicos.
Una de las rutas más curiosas es la que une las islas Westray y Papa Westray en Escocia. La opera la compañía Loganair y el vuelo dura dos minutos. Otra que también llama la atención por su longitud es la que une Shenzhen con Macao, ambas en China. Están separadas tan solo 60 kilómetros y el vuelo dura 30 minutos. Se utiliza generalmente por pasajeros con destino final en Taiwan.
Llama la atención que Armavia, aerolínea armenia, una Birmingham en Inglaterra con Amritsar en India, vía Armenia. El motivo es religioso, Amritsar es el centro espiritual del Sijismo y en Birmingham hay una importante población que profesa esta religión.
A finales de año, la compañía alemana Germania planea volar entre Erbil y Sulaymaniyah en Iraq ocho veces por semana, desde Munich, Dusseldorf y Estocolmo. Según afirman los vuelos se ocupan al 90 por ciento, por encima del 83 de media que tiene la compañía. Alemania tiene una gran población kurda y Germania está cubriendo una necesidad.
El petróleo también crea rutas que parecen extrañas, como Baku, Azerbaijan – Aberdeen, Escocia. Baku se ha convertido en un gran productor de petróleo y Aberdeen, en el Mar del Norte es el centro petrolífero europeo. La ruta la opera Azerbaijan Airlines.
Foto | Flickr-Superjet International
Más información | The Wall Street Journal