Cuando ya te encuentres en el lugar elegido, el contacto con el guardaparque o la persona que tenga responsabilidad en la zona es una buena alternativa. Estas personas nos ayudaran a encontrar toda la información que necesitemos y a despejar las dudas más comunes que tengamos.
Ellos serán los encargados de informarnos acerca de las reglas a seguir dentro del Parque y los diferentes aspectos de la conservación del mismo. Debes conocer qué parte se encuentra habilitada y cuáles no lo están, esto es importante para nuestra seguridad y dado que la gran parte de los lugares tendrán un sector para proteger la fauna y la flora autóctona. Debemos colaborar para preservar tanto los recursos naturales como los culturales de los lugares que visitemos.
Cada parque contará con su propio reglamento y la implementación efectiva estará a cargo de las autoridades pertinentes, teniendo estas la facultad de tomar las medidas necesarias en el caso de no cumplirlas. Por esa razón en cada parque tendrás un panorama muy diferente.
Existen reservas llamadas ‘de papel’ las cuales están declaradas en documentos, pero no tienen un manejo adecuado en le campo, en estos casos se encontrarán abandonadas o sin el personal necesario que nos pueda guiar. En estos casos te aconsejamos pedirles ayuda a las personas que habiten la región. Piensa que se trata de grandes extensiones sin señalizar, y que por más que contemos con la ayuda de los GPS, perdernos en esos lugares no será muy agradable, más aun si desconocemos la fauna que habita en la zona.
Vía | Weekend
Foto | Flickr – Fueguia