Se cumplen seis meses de la ley contra los controladores (I)

Aena va a cerrar el año, según sus propios datos, con una deuda de 12.000 millones de euros procedente de la creación de nuevas terminales y la renovación de infraestructuras. Una deuda que viene de 2009 donde las pérdidas alcanzaron los 353 millones de euros. Y es que 30 de los 48 aeropuertos de su red son deficitarios.

La solución que plantea el Ministerio Fomento es la entrada de capital privado en la gestión de esos aeródromos hasta un 30 por ciento, una privatización de la que no quieren oír hablar.

Con este panorama, desde Aeropuerto Españoles y Navegación Aérea y Fomento se ha tratado en todo momento de llevar la atención periodística y ciudadana hacia los controladores aéreos. La estrategia ha sido hacer ver que tienen muchos privilegios con los que pretende acabar el Gobierno. Eso sí, lo están haciendo a base de decretos ley.

Una actuación que más cerca está de una imposición que de un estado de democracia. Lo peor de todo es que a causa de su mala gestión están poniendo en jaque la seguridad aérea de todos los ciudadanos.

El pasado viernes se cumplieron seis meses de la entrada en vigor una del segundo decretazo que modifica horarios y ha reducido casi a la mitad los salarios de estos trabajadores.

Una normativa que a juicio de los representantes de los controladores ha vulnerado derechos constitucionales como es el caso de la negociación colectiva. «Es un atropello a los derechos fundamentales de cualquier colectivo y un torpedo contra la legislación laboral en España», explica César Cabo, representante de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (Usca). Continuamos desgranando esta normativa en ulteriores artículos.

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Foto | Jon Kepa