Como sabéis Japón es uno de los países más modernos y que se apunta a todas las novedades y sofisticaciones que se pongan de moda ya sea en el ámbito que sea. Hace unos días leí en una revista uno de los últimos gritos en el país nipón que no pueden dejar indiferente a nadie.
Se trata de un método para relarse muy aromático aunque poco ortodoxo: baños termales colectivos en vino tinto. En realidad estos baños, Kowakien Yunessun, ubicados en la localidad de Hanoke (Kanagawa), están abiertos desde hace cuatro años, aunque parece ser que ahora es cuando están en la cumbre de su esplendor alcanzando un éxito sin precedentes cuando abrieron una piscina con un peculiar tratamiento de vinoterapia.
Desde el pasado mes de noviembre, la pileta ha tenido una mayor repercusión en el ámbito internacional con motivo de la puesta a la venta de una nueva cosecha del vino francés Beaujolais Nouveau. Ya que los responsables del spa han sustituido el vino que utilizaban habitualmente en la piscina de vinoterapia por el de su patrocinador.
Este original vino-spa consiste en una piscina a modo de spa radicada en una zona llena de verdor en pleno aire libre, como si el bañista se encontrara en plan selva americana. En uno de los laterales tienen puesto a modo de decoración una enorme botella de vino gigante con varias cubas alrededor.
La piscina en sí, en lugar de ser un manantial de agua, en realidad es una pileta rebosante de vino tinto para proporcionar al cuerpo todo lo que necesita, según reclaman los propietarios. De lo que ya no estamos tan seguros es de que el vino pueda hacerle sombra a un buen Ribera o un Rioja, habrá que probarlo.
Además del bañito, el usuario puede degustar un vasito del espumoso al tiempo que pone el culete a remojo ya que la piscina tampoco da para hacerse unos largos. De lo que no cabe duda es de que clientes no les faltan a juzgar por las listas de espera que tiene la piscina para darse un bajito.
Vía | Termalista
Más información | Japón por Descubrir