Uno de los aviones de la flota de la compañía aérea australiana Qantas, un Airbus A380, se ha visto a hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Singapur. Un aterrizaje forzado después de que ocurrieran una serie de fallos en el aparato mientras estaba en pleno vuelo mientras sobrevolaba Indonesia.
Sólo han pasado tres años después de que se inaugurara el primer vuelo comercial de este gigante del aire. Y este es el primer fallo técnico grave que se produce. «Estamos investigando los hechos, el avión de Singapur a Sidney sufrió problemas cuando sobrevolaba Indonesia», han explicado responsables de la firma aérea.
Parece ser que los medios de comunicación locales han recogido testimonios de habitantes de la isla indonesia de Batam, cerca de Singapur, donde aseguran que oyeron una fuerte explosión sobre las 9,15 hora local.
El Airbus A380 es el mayor avión de pasajeros del mundo. Según los entendidos, ha demostrado estar fabricado con una calidad llevada al máximo. Motivo que algunos se atreven a asegurar que es por lo que no ha ocurrido nada al pasaje que realizaba el vuelo de Qantas. Es decir, que la góndola, que es el lugar en el que va ubicado el motor del avión, soportó las altas presiones de la explosión; y que el fuselaje del aparato fue capaz de soportar los golpes de los fragmentos que salieron despedidos.
Todo ello es lo que puede que le haya salvado la vida a los viajeros del avión que ha sufrido el percance. Sin duda, seguirá siendo el gigante del aire y, hasta que se demuestre lo contrario, uno de los más seguros.
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