¿Habrá huelga de controladores este verano?

La respuesta certera no la sabe nadie, lo que parece un hecho es la falta de seguridad aérea que se viene reflejando durante los últimos meses en numerosos aeropuertos españoles. No sabemos de quién es la culpa, pero no lo debemos olvidar cuando vayamos a viajar estas vacaciones, por nuestra propia seguridad.

En lo que se refiere a los controladores tan enjuiciados pública y políticamente, éstos han celebrado varias asambleas en los centros de control de AENA. ¿El objetivo? solicitar un informe a un abogado con el fin de que les asesore para conocer las condiciones en las que pueden ejercitar ‘el derecho legal de huelga’, tras el famoso decretazo del ministro de Fomento.

Y todo esto ocurre, como en otras ocasiones, a las puertas de la temporada veraniega. Es decir, que además de la crisis que obliga a reducir los viajes programados y acortar los destinos, puede que nos quedemos en tierra.

De lo que no hay duda es del ambiente crispado que hay en las salas de control propiciadas por el asedio al que están siendo sometidos desde el Gobierno. Una crispación a la que hay que sumar la bajada de sueldo de los funcionarios, ya que los controladores que provienen de antes de 1990 (cuando AENA no era estatal) son funcionarios en excedencia. El resto de los 2.400 controladores, más del 60 por ciento de los controladores aéreos son empleados públicos.

Un descontrol que está suponiendo una enorme tensión que puede tener consecuencias en la seguridad aérea. Lo que quedó claro en las asambleas realizadas en la práctica totalidad de los centros de control de AENA es que se baraja la posibilidad de encadenar paros de dos horas durante los viernes del mes de junio.

Sean cuales sean los movimientos de protesta que, finalmente, haga el colectivo, parece ser que se articularán «en el estricto marco de la ley» y con el objetivo de que la «opinión pública precian una actitud responsable alejada de cualquier práctica de huelga de celo».

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