Las reacciones al anuncio de huelga en Semana Santa por parte de los trabajadores de Aena no se han hecho esperar. Aerolíneas, agencias de viaje, hosteleros y hoteleros, organizaciones de ususarios y consumidores e incluso autoridades como el Gobierno canario han pedido que se fijen urgentemente los servicios mínimos. Advierten también que, como decíamos ayer, el daño al sector ya está hecho, tan sólo con el aviso. La imagen de España como destino ya estaba fuertemente dañada por el conflicto con los controladores aéreos.
Todos los reclamantes coinciden en que la huelga es un derecho de los trabajadores, sin embargo muchos coinciden en considerar que «es un chantaje a todo un país», como ha dicho el presidente de la Asociación Empresarial de Agencias de Viajes Españolas (AEDAVE), José Manuel Maciñeiras. Considera que la huelga debe estar limitada y debería crearse una ley que controlara estas iniciativas en algunos sectores que pueden perjudicar a todo el país.
Para la OCU de nuevo se están tomando como rehenes a los pasajeros y se trata de «un nuevo ejemplo de falta de respeto» que causará un daño tremendo a los pasajeros y a la imagen de España. Piden al Estado que garanticen los servicios mínimos suficientes y le recuerda que debe sancionar si no se cumple. A las aerolíneas les piden flexibilidad con el cambio de billetes y que busquen alternativas.
El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, exige al Gobierno central que declare el 100 por ciento de los servicios mínimos en los aeropuertos canarios. El daño en las islas es mucho peor que en la península donde hay opción de tomar otros medios de transporte.
Los convocantes por su parte y por boca de uno de los portavoces de la Asamblea piden que «Los pasajeros tienen que entender que estamos aquí para defender sus derechos como ciudadanos de un bien público del Estado. Estas acciones van en beneficio de todos los ciudadanos porque la privatización va a suponer un aumento de las tasas aeroportuarias, una perdida de calidad en el servicio y la reducción de la seguridad«.
Si no vienen turistas poco nos importará que el servicio sea de peor calidad, una caída del sector turístico empobrece a España y con ella a los que aquí vivimos.
Vía | Hosteltur
Foto | Cinco Días
